La contundencia de un hueco,
en una línea, en un ancho,
y saber que la vida
es cuestión de tiempo.
Fandangos de María Vargas acompañados por Paco de Lucía.
Ay de recuerdos
mi pensamiento rodaba
embriagado de recuerdos
el vino que yo tomaba
era tan solo sus besos
que llorando los buscaba.
A mi niño
los rayos de sus encías
ya los veo floreciendo
y me da tanta alegría
que llorando estoy riendo
mi niño del alma mía.
Ay de recuerdos
mi pensamiento rodaba
embriagado de recuerdos
el vino que yo tomaba
era tan solo sus besos
que llorando los buscaba.
A mi niño
los rayos de sus encías
ya los veo floreciendo
y me da tanta alegría
que llorando estoy riendo
mi niño del alma mía.